XVI. Dios ordena a Jeremías escribir
todas sus palabras.
A. Dios le habla desde el cuarto año
del rey Joacim.
1. Dios le indica que escriba y haga un
libro de estas palabras.
a. 36:1 Aconteció en el cuarto
año de Joacim hijo de Josías, rey de Judá, que vino esta palabra de Jehová a
Jeremías, diciendo:
b. 36:2 Toma un rollo de libro, y escribe en él todas
las palabras que te he hablado contra Israel, contra Judá, y contra todas las
naciones, desde el día que comencé a hablarte, desde los días de Josías hasta
hoy.
c. 36:3 Quizá oiga la casa de
Judá todo el mal que yo pienso hacerles, y se arrepienta cada uno de su mal
camino. Yo los perdone de su maldad y su pecado.
2. Baruc escribe las palabras
dictadas de Jeremías en el libro.
a. 36:4 Llamó Jeremías a Baruc
hijo de Nerías, y escribió Baruc de boca de Jeremías, en un rollo de libro,
todas las palabras que Jehová le había hablado.
B. Jeremías tiene prohibido entrar a
la casa de Dios.
1. Baruc lee las palabra de Dios,
en la casa de Dios.
a. 36:5 Después mandó Jeremías a Baruc, diciendo: A
mí me han prohibido entrar en la casa de Jehová.
b. 36:6 Entra tú, y lee lo que escribiste, las
palabras de Jehová y que el pueblo escuche, en la casa de Jehová, el día del
ayuno. También las leerás a oídos de todos los de Judá que vienen de sus
ciudades.
c. 36:7 Quizá llegue la oración de ellos a la
presencia de Jehová, y se vuelva cada uno de su mal camino. Porque grande es el
furor y la ira que ha expresado Jehová contra este pueblo.
d. 36:8 Baruc hijo de Nerías,
hizo conforme a todas las cosas que le mandó Jeremías profeta, leyendo en el
libro las palabras de Jehová en la casa de Jehová.
2. Promulgan ayuno y Baruc lee el
libro de Jeremías.
a. 36:9 Aconteció, en el año quinto de Joacim, hijo
de Josías, rey de Judá, en el mes noveno, que promulgaron ayuno en la presencia
de Jehová a todo el pueblo de Jerusalén y a todo el pueblo que venía de las
ciudades de Judá a Jerusalén.
b. 36:10 Baruc leyó en el libro las palabras de
Jeremías en la casa de Jehová, en el aposento de Gemarías hijo de Safán
escriba, en el atrio de arriba, a la entrada de la puerta nueva de la casa de
Jehová, y el pueblo escuchaba.
3. Micaías va a casa del rey y cuentan
las palabras del libro.
a. 36:11 Después de oír del libro
todas las palabras de Jehová, Micaías hijo de Gemarías, hijo de Safán.
b. 36:12 Fue a la casa del rey,
al aposento del secretario, y miro que todos los príncipes estaban allí
sentados, esto es: Elisama secretario, Delaía hijo de Semaías, Elnatán hijo de
Acbor, Gemarías hijo de Safán, Sedequías hijo de Ananías, y todos los
príncipes.
c. 36:13 Les contó Micaías todas
las palabras que había oído, cuando Baruc leyó en el libro y todo el pueblo
escuchaba.
4. Los príncipes llaman a Baruca
para que le lea el libro.
a. 36:14 En ese momento, todos los príncipes enviaron a
Jehudí hijo de Netanías, hijo de Selemías, hijo de Cusi, para que dijese a
Baruc: Toma el rollo en el que leíste a oídos del pueblo, y ven. Baruc hijo de
Nerías tomó el rollo en su mano y vino a ellos.
b. 36:15 Le dijeron: Siéntate ahora, y léelo a
nosotros. Y se lo leyó Baruc.
c. 36:16 Cuando oyeron todas aquellas palabras, cada
uno se volvió espantado a su compañero, y dijeron a Baruc: Sin duda contaremos
al rey todas estas palabras.
5. Preguntan a Baruc como
escribió esas palabras.
a. 36:17 Preguntaron a Baruc, diciendo: Cuéntanos
ahora cómo escribiste de boca de Jeremías todas estas palabras.
b. 36:18 Baruc les respondió: El me dictaba de su boca
todas estas palabras, y yo escribía con tinta en el libro.
c. 36:19 En ese momento, el dijeron los príncipes a
Baruc: Ve escóndete, tú y Jeremías, y nadie sepa dónde están.
d. 36:20 Entraron donde estaba el rey, al atrio,
después de haber guardado el rollo en el aposento de Elisama secretario;
contaron al rey y él escucho todas estas palabras.
6. El rey manda a buscar el libro y se lo
leen.
a. 36:21 Envió el rey a Jehudí a que tomase el rollo,
el cual lo tomó del aposento de Elisama secretario, leyó en él Jehudí y el rey
lo escuchaba, junto a todos los príncipes.
b. 36:22 El rey estaba en la casa de invierno en el
mes noveno, y había un brasero ardiendo delante de él.
7. El rey Joacim escucha el libro,
lo quema y no tubieron temor.
a. 36:23 Cuando Jehudí había leído tres o cuatro hojas,
lo rasgó el rey con un cortaplumas de escriba, y lo echó en el fuego que había
en el brasero, hasta que todo el rollo se consumió sobre el fuego que en el
brasero había.
b. 36:24 No tuvieron temor, ni rasgaron sus vestidos,
el rey y todos sus siervos que oyeron todas estas palabras.
c. 36:25 Aunque Elnatán y Delaía y Gemarías rogaron al
rey que no quemase aquel rollo, no los quiso oír.
8. El rey manda a apresar a Baruc
y a Jeremías.
a. 36:26 También mandó el rey a Jerameel hijo de
Hamelec, a Seraías hijo de Azriel y a Selemías hijo de Abdeel, para que
prendiesen a Baruc el escribiente y al profeta Jeremías. Pero Jehová los
escondió.
9. Dios manda a escribir
nuevamente el libro.
a. 36:27 Vino palabra de Jehová a Jeremías, después
que el rey quemó el rollo, las palabras que Baruc había escrito de boca de
Jeremías, diciendo:
b. 36:28 Vuelve a tomar otro rollo, y escribe en él
todas las palabras primeras que estaban en el primer rollo que quemó Joacim rey
de Judá.
10. Escriben el libro lo reafirma
con otras palabras al rey Joacim.
a. 36:29 Dirás a Joacim rey de Judá: Así ha dicho
Jehová: Tú quemaste este rollo, diciendo: ¿Por qué escribiste en él, diciendo:
De cierto vendrá el rey de Babilonia, y destruirá esta tierra, y hará que no
queden en ella ni hombres ni animales?
b. 36:30 Por tanto, así ha dicho
Jehová acerca de Joacim rey de Judá: No tendrá quien se siente sobre el trono
de David; su cuerpo será echado al calor del día y al hielo de la noche.
c. 36:31 Castigaré su maldad en
él, en su descendencia y en sus siervos. Traeré sobre ellos, y sobre los
moradores de Jerusalén, sobre los varones de Judá, todo el mal que les he
anunciado y no escucharon.
d. 36:32 Tomó Jeremías otro rollo
y lo dio a Baruc hijo de Nerías escriba; y escribió en él de boca de Jeremías
todas las palabras del libro que quemó en el fuego Joacim rey de Judá. Siendo
añadidas en el libro muchas otras palabras semejantes.
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