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Capítulo 10

B. Las cláusulas para la casa de Israel por su idolatría.

1. Los ídolos no tienen poder ni para hacer bien, ni mal.

a. 10:1  Oigan la palabra que Jehová ha hablado sobre ustedes, oh casa de Israel.

b. 10:2  Así dijo Jehová: No aprendas el camino de las naciones, ni de las señales del cielo, tengas temor, aunque las naciones las teman.

c. 10:3  Porque las costumbres de los pueblos son vanidad. Porque del leño del bosque que cortaron. Hacen obra las manos del artífice con buril.

d. 10:4  Con plata y oro lo adornan. Con clavos y martillo lo afirman, para que no se mueva.

e. 10:5  Derechos están como palmera, y no hablan. Son llevados, porque no pueden andar. No tengas temor de ellos. Porque ni pueden hacer mal, ni para hacer bien tienen poder.

2. Los ídolos son obras de sus manos.

a. 10:6  No hay Dios semejante a ti, oh Jehová. Tú eres grande y tu nombre es grande en poder.

b. 10:7  ¿Quién no te temerá, oh, Rey de las naciones? Porque a ti es debido el temor. Porque entre todos los sabios de las naciones y en todos sus reinos, no hay semejante a ti. Ap. 15:4.

c. 10:8  Todos son presumidos y desorientados. Gente tonta, que enseñan vanidades del leño.

d. 10:9 Traen de Tarsis planchas de plata, y de Ufaz oro refinado. Luego los visten con telas púrpuras. Todo esto es obra de artífices y fundidores. Todo es obra de manos expertas.

3. Jehová es Dios poderoso, eterno y glorioso.

a. 10:10  Más Jehová es el Dios verdadero. Él es Dios vivo y Rey eterno. A su ira tiembla la tierra, y las naciones no pueden sufrir su indignación.

b. 10:11  Les dirás así: Los dioses que no hicieron los cielos ni la tierra, desaparezcan de la tierra y de debajo de los cielos.

c. 10:12  El que hizo la tierra con su poder, el que puso en orden el mundo con su saber, y extendió los cielos con su sabiduría.

d. 10:13 A su voz se produce muchedumbre de aguas en el cielo, y hace subir las nubes de lo postrero de la tierra. Hace los relámpagos con la lluvia, y saca los depósitos del viento atrapado.

4. Detrás de los ídolos no hay ningún espíritu.

a. 10:14  Todo hombre se embrutece, y le falta ciencia. Todo fundidor se avergüenza de su ídolo. Porque mentirosa es su obra de fundición, y no hay espíritu en ella.

b. 10:15  Vanidad son, obra vana. Perecerán al tiempo de su castigo.

5. La herencia de Jacob es Jehová, no es la tierra.

10:16  La porción de Jacob no es así. Porque él es el Hacedor de todo, e Israel es la vara de su heredad. Jehová de los ejércitos es su nombre.

6. Lamento y quebrantamiento por la destrucción de la tierra.

a. 10:17  Recoge de las tierras tus mercaderías, la que moras en lugar fortificado.

b. 10:18  Porque así ha dicho Jehová: En un momento, de una vez, arrojaré con honda los moradores de la tierra, y los afligiré, para que lo sientan.

c. 10:19  ¡Ay de mí, por mi quebrantamiento! Mi llaga es muy dolorosa. Pero dije: Ciertamente, enfermedad mía es esta, y debo sufrirla.

d. 10:20  Mi tienda está destruida, y todas mis cuerdas están rotas. Mis hijos me han abandonado y murieron, no hay ya más quien levante mi tienda, ni quien cuelgue mis cortinas.

7. La causa de la destrucción.

a. 10:21 Porque los pastores son presumidos, y no buscaron a Jehová. Por tanto, no prosperaron, y todo su ganado se esparció.

b. 10:22  Se escuchan noticias, y alboroto grande de la tierra del norte. Para dejar en soledad a todas las ciudades de Judá, en morada de chacales.

8. Reconozco quien ordena los pasos del hombre es Dios.

a. 10:23  Conozco, oh Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos. Si, no de Jehová.

9. Oración para qué cambie su enojo Jehová.

a. 10:24 Castígame, oh Jehová, más con juicio; no con tu furor, para que no me aniquiles.

b. 10:25  Derrama tu enojo sobre los pueblos que no te conocen, y sobre las naciones que no invocan tu nombre. Porque se comieron a Jacob, lo devoraron, le han consumido, y han asolado su habitación.